Las personas interesadas en el modelismo y las manualidades suelen contar con un conocimiento muy acabado de los diferentes intereses que tienen otros entusiastas y aficionados. Por este motivo, no es de extrañar que muchos de entre ellos decidan comenzar su propio emprendimiento, ofreciendo algún producto o servicio que pueda ser de interés para este público. En este artículo, se presentan entonces algunos consejos para quienes decidan dar el salto al emprendedurismo efectivamente y minimizando los riesgos.
En primer lugar, es necesario tener en claro qué tipo de producto o servicio se quiere ofrecer y conocer si existe una real demanda al respecto. Para verificar estos conceptos iniciales que surgen del instinto y del conocimiento particular del mercado del hobby, se puede recurrir a bases de datos de preferencias de consumo y a las encuestas de opinión. Una serie corta de preguntas cuidadosamente elaboradas y dirigidas al público objetivo, -los hobbistas-, puede brindar mucha información acerca de la necesidad real del producto que se quiere comercializar, de sus características y precio de venta estimado.
En segunda instancia, es necesario conocer las condiciones actuales de la competencia. Para ello se debe realizar un relevamiento de todos los productos y servicios que ofrecen algo similar, la competencia directa, y también de aquellos otros que, sin dedicarse exactamente al mismo fin, ofrecen una alternativa que puede captar una buena parte de la demanda que se quiere cubrir. A partir de esos datos, se puede elaborar un cuadro comparativo que sintetice las características, ventajas y desventajas de cada uno de esos competidores.
La tercera estrategia tiene que ver con hacer un análisis de costos para el lanzamiento de dicho producto a la venta. ¿Qué tipo de inversiones son necesarias y cuánto dinero representan? En principio, esta pregunta puede ser complicada de responder, pero realizar estimaciones con respecto a los gastos que demandaría el emprendimiento para, al menos, su primer año de lanzamiento, permite evaluar cuáles son las opciones de financiamiento a las que deberá recurrirse para costear el desarrollo de la actividad. Los aportes de los emprendedores y sus familias suelen siempre estar presentes pero no alcanzan a cubrir la totalidad de los montos en juego, es por esto que el aporte de inversores o de subsidios estatales se muestra como un complemento a considerar.